Inhalar un gas tóxico, ¿la última moda en el rendimiento deportivo?
Aunque el monóxido de carbono es considerado uno de los principales contaminantes de la atmósfera y puede tener importantes efectos adversos si se inhala en altas dosis, estudios recientes sugieren que en bajas dosis e inhalado de forma continuada puede producir adaptaciones beneficiosas para el rendimiento. ¿Estamos ante un nuevo tipo de doping?