El deseo o libido sexual está afectado por factores tan diversos como el estrés, la alimentación o el estado de ánimo. La vida sexual juega un importante papel en la salud y el bienestar mental de las personas. Sin embargo, debido al alto ritmo de vida y los malos hábitos alimenticios que predominan en nuestra sociedad, a menudo queda descuidada y relegada a un último plano.
Aunque los deportistas de resistencia son normalmente un ejemplo de personas saludables, los altos niveles de estrés a los que estas personas someten a su organismo podrían comprometer su salud sexual. Con el fin de evaluar dicha hipótesis, un estudio publicado por investigadores de Carolina del Norte analizó a 1077 deportistas de resistencia que fueron preguntados sobre su libido sexual además de por distintas variables de su entrenamiento como la intensidad o la duración de sus sesiones.
Los autores encontraron una relación significativa entre la carga de entrenamiento y la libido sexual. Así, tanto aquellos sujetos que entrenaban con una alta intensidad como aquellos que entrenaban durante largos periodos de tiempo presentaban de forma significativa una menor libido sexual que aquellos que entrenaban con baja o moderada intensidad o que lo hacían durante menor tiempo.
Sin embargo, los resultados de este estudio deben ser tomados con cautela, ya que aunque altas cargas de entrenamiento se asociaron con una menor actividad sexual, este hecho parece ser debido a un mayor cansancio de los deportistas. De hecho, el ejercicio físico supone una mejora del riego sanguíneo y un aumento de los niveles de testosterona, contribuyendo ambos factores a una mayor libido sexual. Además, el ejercicio físico podría ser especialmente beneficioso para este fin en aquellas personas con problemas cardiovasculares como hipertensión (un factor que afecta de forma importante a la libido sexual) o en personas con sobrepeso, las cuales presentan a menudo unos menores niveles de testosterona y con ello una menor libido.
En conclusión, aunque este reciente estudio pone de manifiesto las consecuencias negativas que puede tener para nuestra vida sexual someter al organismo a grandes cargas de entrenamiento por la fatiga que se genera, los beneficios del ejercicio físico para la mejora de la libido son claros. Así, realizar ejercicio físico (de fuerza y de resistencia) nos ayudará a perder peso, mejorar la circulación, aumentar los niveles de testosterona y disminuir los niveles de estrés, contribuyendo así a mantener una vida sexual activa y saludable.
Referencia:
Hackney, A. C. et al (2017) Endurance Exercise Training and Male Sexual Libido. Medicine and science in sports and exercise, Feb 13. [Epub ahead of print]