La sarcopenia, entendida como la pérdida progresiva de la masa y la función muscular asociada al envejecimiento, es considerada un problema de salud pública debido a su creciente prevalencia y su implicación en la pérdida de capacidad funcional en las personas mayores. En ausencia de intervenciones farmacológicas útiles, la actividad física aparece como la única opción en la promoción de la salud musculoesquelética en la edad avanzada. Pero ¿es realmente efectiva? ¿qué sabemos al respecto? En este artículo revisamos la evidencia disponible sobre el rol de la actividad física y el ejercicio en el manejo de la sarcopenia.