Un sujeto metabólicamente sano es aquel que cumple 0 o 1 de los criterios definidos para el síndrome metabólico. Se estima que el 10% de adultos de los EEUU son personas con obesidad metabólicamente sanas, mientras que el 8% tienen un Índice de Masa Corporal (IMC) normal, pero NO son metabólicamente sanos.
Investigadores de las Universidades de Granada y South Carolina observaron que una característica esencial de las personas con obesidad (utilizando el IMC o el % de grasa corporal para definir la obesidad) y metabólicamente sanas es que muestran un mayor fitness cardiorrespiratorio. Además, presentaron un 30-50% menor riesgo de enfermedad cardiovascular y mortalidad que los que padecían obesidad, pero NO eran metabólicamente sanos. Sorprendentemente, no existieron diferencias entre los que tuvieron obesidad, pero eran metabólicamente sanos y los sujetos con un % graso normal y metabólicamente sanos, sugiriendo que el fitness cardiorrespiratorio desarrolla un rol fundamental frente a la enfermedad (1). Por tanto, la forma física va a determinar en gran parte el riesgo de mortalidad, independientemente de si padeces obesidad o no.
Fig. 1.Las dos caras de la obesidad (2).
REFERENCIAS
[1] F. B. Ortega, D. -c. Lee, P. T. Katzmarzyk, J. R. Ruiz, X. Sui, T. S. Church, and S. N. Blair, “The intriguing metabolically healthy but obese phenotype: cardiovascular prognosis and role of fitness,” Eur. Heart J., vol. 34, no. 5, pp. 389–397, Feb. 2013.
[2] R. S. Ahima and M. A. Lazar, “The Health Risk of Obesity–Better Metrics Imperative,” Science (80-. )., vol. 341, no. 6148, pp. 856–858, Aug. 2013.